lunes, 15 de agosto de 2016

Conchiglioni rellenos en salsa de tomates


Para este tipo de plato, es preferible que la pasta sea seca. Son excepcionales para rellenarlos pero con sumo cuidado de no romperlos.



Los Conchiglioni son los llamados caracoles o conchas que, por su tamaño y forma, son aptos para rellenar.





Para el relleno, muy simple, rehogamos cebolla, zanahorias y morrones en aceite de oliva. Salpimentamos y dejamos que se enfríe.




Por otro lado, cortamos jamón cocido, queso gouda y mozzarella en pequeños cubos y le agregamos queso parmesano rallado. 


Mezclamos bien ambas preparaciones y dejamos reservado para rellenar los conchiglioni.



Previo al relleno es aconsejable marca la pasta. Para ello ponemos a hervir agua con sal y cuando comienza la ebullición incorporamos la pasta. Solamente dejamos unos minutos, no cocidos y antes del dente. Dejamos enfriar y luego rellenamos.




Comenzamos a preparar la salsa de tomates y, en este caso, le agregaremos pequeños trozos de bondiola de cerdo para acompañarlo en tipo estofado.

Rehogamos cebolla, ajo y zanahoria con pequeños trozos de bondiola de cerdo

Agregamos la salsa de tomates:



Ahora en una fuente para horno agregamos parte de la salsa de tomates con los trozos de bondiola en el fondo y encima vamos colocando los conchiglioni rellenos, cubrimos con más salsa e incorporamos por encima queso parmesano rallado. Llevamos al horno durante unos 15 a 20 minutos.









Retiramos del horno y servimos:
















sábado, 6 de agosto de 2016

Chivito Merlino


En unos de los tantos viajes por mi país, recorrí la provincia de San Luis y, dentro de las ofertas gastronómicas  regionales, el chivito o cabrito es un lenguaje tradicional y común en el boca en boca de todos.

Con más de 300.000 cabezas de ganado caprino, los puntanos se hacen muy fuertes con esta carne rica, sabrosa y delicada al paladar. 

Existen diferentes formas de preparar un chivito y, en este caso en particular, trabajé con uno de la ciudad de Merlo. 

Podemos hacerlo al asador, a la parrilla, al horno, en escabeche y a la cacerola, en todas las formas siempre responde muy bien al paladar.

A la leña: primero debemos estaquearlo o colocarlo en una cruz de hierro, bien atado




Si tenemos un buen lugar los hacemos en el asador o, de lo contrario, podemos armar en un bastidor en una parrilla al fuego de leña:


Al horno: Tomamos el cuarto trasero y lo adobamos muy bien con ajo picado, orégano, ají molido, sal y pimienta. 


Luego de unos 45 a 60 minutos:


A la parrilla: Trozamos unas partes y, luego de que el fuego se encuentre bien prendido, colocamos en la parrilla.



Luego de unas horas, y al encontrase bien dorado, servimos:


Una riñonada de chivito:


Y el especial es el Chivito a la cacerola:

Trozamos un cuarto y parte del costillar en porciones y lo colocamos en una olla a dorar en aceite de oliva con ajo picado, sal y pimienta negra molida.

Retiramos las presas y en el mismo fondo rehogamos cebolla común, verdeo, ají morrón rojo, verde y amarillo. Luego de unos minutos, incorporamos un vaso de vino blanco y reforzamos el sabor con ají molido y orégano.


















Incorporamos las presas de chivito selladas y dejamos cocinar durante 20 minutos con la olla tapada. El acompañamiento puede ser: una papas hervidas, un puré o bien agregarle durante la cocción cubos de papas, zapallo y batatas.








Tarta de Jamón y Mozzarella



Una comida rápida, sabrosa y colorida para hacer en casa y degustar en familia.

Comencemos con la masa. En este caso, trabajamos con la clásica "masa quebrada":

  • 250 gramos de harina
  • 60 gramos de manteca
  • 2 huevos
  • pizca de sal fina


Colocamos en la procesadora los 250 gramos de harina con la manteca en trozos pequeños. Procesamos unas vueltas para que se integren, luego agregamos los dos huevos y la pizca de sal fina. Procesamos todo hasta formar una masa. Dejamos descansar y luego la estiramos con el palo de amasar hasta darle forma en la fuentes o cuenco que utilizaremos para el horno. Debemos reservar una parte de la masa para la tapa de la tarta.





Para el relleno debemos rehogar en una sartén cebolla común, verdeo, ajo y morrones rojos. Salpimentamos y reservamos.







Tanto el jamón cocido como la mozzarella deben trozarse en cubos.
Una vez que tenemos todos los ingredientes preparados, los colocamos en un bowl y lo introducimos en la fuente o cuenco que hemos colocado la masa quebrada:



Mezclamos un huevo y 200 gramos de crema de leche en otro bowl, se lo incorporamos a la mezcla anterior y reforzamos con orégano, ají molido y queso parmesano rallado:

Si el cuenco es de barro se aconseja colocar una base de papel aluminio y encima la masa.




Le colocamos la tapa, pintamos con huevo batido y pinchamos con un tenedor para que durante la cocción libere los vapores.






Ponemos en el horno a 180º durante 30 minutos o hasta que la tapa se encuentre dorada:




Dejar reposar unos minutos, cortar y servir. Podemos acompañarla con una ensalada fresca de rúcula o repollo colorado.



















Cortar en porciones: